GOLF
El golf es un deporte considerado poco agresivo y de bajo impacto, que requiere un trabajo aeróbico suave, pero que presenta una gran complejidad técnica durante el golpeo, lo que predispondrá a lesiones específicas por sobreuso o mala técnica, denominadas tecnopatías.
El golpeo o swing requiere un movimiento coordinado de diferentes estructuras músculotendinosas y articulares implicadas, cuya técnica debe perfeccionarse para evitar lesiones por sobrecarga. La incidencia de lesiones asociadas al golf se ha incrementado por una mala técnica del swing en deportistas amateur o aquellos con patologías previas que practican este deporte.
Los principales factores que influyen en las lesiones del golf son la mala técnica del swing, sobrecarga repetitiva, falta de flexibilidad y elasticidad articular, fuerza muscular desequilibrada, el tipo de palo de golf y las condiciones del césped.

Las lesiones más frecuentes asociadas al gesto deportivo de golpeo o swing, denominadas tecnopatías, son las siguientes:
- Columna lumbar: es una de las lesiones más frecuentes del golf debido a la torsión que se genera sobre la columna durante el swing, que puede producir síndrome facetario o contractura muscular lumbar.
- Hombro: durante las diferentes fases del golpeo se produce un amplio movimiento de los hombros, por lo que puede producirse bursitis y tendinopatía del manguito rotador al golpear la bola o, más frecuentemente, al golpear el suelo de forma accidental.
- Codo: una de las lesiones más comunes en el golf es la famosa epitrocleitis o codo de golfista, asociada a movimientos excesivos de pronosupinación del antebrazo. También pueden sobrecargarse los músculos epicondíleos, produciendo una epicondilitis o codo de tenista.
- Muñeca: la lesión más frecuente de la muñeca es la tenosinovitis de DeQuervain por el agarre del palo con el pulgar. Otra lesión que puede aparecer es una fractura de escafoides o del gancho del ganchoso por un golpeo brusco del palo contra el suelo. Además, otras patologías como el síndrome del túnel carpiano, tendinitis del cubital anterior, síndrome de entrecruzamiento o lesión del fibrocartílago triangular.
- Rodilla: por un mal gesto deportivo, puede producir lesiones meniscales y esguinces o distensiones del ligamento colateral interno.
- Cadera: al igual que la rodilla, el mal gesto deportivo puede conllevar tendinopatías del psoas o del glúteo medio y lesiones del labrum.
La siguiente imagen muestra las lesiones más frecuentes del golf (pincha en el diagnóstico para más información de cada lesión):

PREVENCIÓN DE LAS LESIONES DEL GOLF
Las principales lesiones del golf se producen por una mala técnica de golpeo o un exceso de actividad. Algunos consejos para la prevención de lesiones son los siguientes:
- Acondicionamiento previo: el calentamiento y estiramiento previo durante al menos 10´ es fundamental, haciendo hincapié en la columna vertebral lumbar, hombro, codos y muñecas.
- Reconocimiento médico y Evaluación funcional fisio-readaptación. Es importante para descartar patologías o condiciones que predisponen a una lesión durante el swing, ya que cada vez más gente y con más edad practica golf de forma amateur.
- Nutrición e hidratación adecuada, ya que está relacionado con calambres, fatiga y distensiones que reducen el rendimiento y la capacidad del cuerpo para afrontar la carga física.
- Inicio gradual en principiantes o tras un periodo de descanso: empezar o reanudar de forma progresiva la actividad de golf hasta alcanzar el nivel deseado.
- Descanso adecuado evitando el sobreentrenamiento: son fundamentales los periodos de descanso para la recuperación de las estructuras músculotendinosas que más se sobrecargan en golf.
- Mantener una buena forma física, ejercitando en el gimnasio la musculatura implicada en el swing (columna, brazos y cadera) y realizando ejercicio aeróbico para resistir mejor la actividad. Además, hay que realizar ejercicios de flexibilización articular y muscular.
- Perfeccionar la técnica del swing: ya que como hemos dicho, las lesiones de golf so producen fundamentalmente por una mala técnica durante el golpeo.
- Uso de palo y calzado adecuado, usar zapato cómodo sin tacones para evitar esguinces fortuitos o dolores del pie por metatarsalgias.
En Synergia contamos con un Equipo multidisciplinar formado por Traumatólogos Deportivos, Médicos Especialistas en Reconocimientos Médicos y Pruebas de Esfuerzo, Fisioterapeutas, Readaptadores y Podólogos Deportivos que pueden ayudarte para la práctica segura de tu deporte favorito, previniendo lesiones o resolviéndolas en el menor tiempo posible.